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Dr. Andrey Moreno Torres - Cirujano de Cabeza y Cuello

Cáncer de tiroides y el COVID-19

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Cáncer Tiroides y el Covid-19

Cáncer de tiroides y el COVID-19

Desde que inició la pandemia causada por el COVID-19 a principios de 2019, mucho se ha hablado sobre cómo podría afectar esta enfermedad a las personas con condiciones médicas preexistentes. Sin embargo, al tratarse de un virus nuevo y que tomó a la mayor parte del mundo por sorpresa, poco es lo que se sabe sobre su accionar en el cuerpo humano.

Afortunadamente, con el pasar de las semanas, los investigadores médicos han ido concretando respuestas y hoy tenemos un mayor entendimiento del virus. En estos momentos complejos, es importante tener información médica verificada y acertada, para evitar caer en noticias falsas que solo causan ansiedad y confusión. Po esto, a continuación, te contamos cómo puede afectar el COVID-19 a los pacientes con cáncer de tiroides.

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¿Qué es el COVID-19?

El SARS-CoV-2 es un nuevo virus que puede afectar tus pulmones y vías respiratorias, al causar la enfermedad COVID-19. Se trata de un tipo de coronavirus, de allí que muchas personas usen este nombre para referirse a la enfermedad.

Los síntomas típicos pueden ser leves o graves y pueden aparecer entre 2 y 14 días después de la exposición al virus. Los síntomas pueden incluir fiebre, tos, falta de aliento, escalofríos, dolores de cabeza, dolor de garganta y nueva pérdida de sabor u olfato. Otros síntomas pueden incluir dolores y molestias, congestión nasal o secreción nasal o diarrea.

Algunas personas contagiadas pueden no presentar síntomas, lo cual hace más complicado evitar su propagación y conocer la cantidad real de casos. Una persona asintomática, puede transmitir el virus sin saberlo.

El virus se propaga a través de las gotas que se esparcen al toser, de forma similar a como se transmite la gripe. También se puede propagar a través de objetos de uso cotidiano, paquetes y alimentos, que fueron impregnados por los fluidos nasales de una persona contagiada ya que el virus puede sobrevivir varios días en diferentes superficies. 

Si tengo cáncer de tiroides, ¿soy población de alto riesgo?

No existen datos concretos sobre la evolución del COVID-19 en pacientes con cáncer de tiroides, ni cómo los afecta en particular. Sin embargo, en sí mismo este tipo de cáncer no causa una supresión del sistema inmunológico que es la condición primordial para ser considerado población de alto riesgo.

Esto cambia si has recibido quimioterapia, radioterapia o cirugia recientemente ( las cirugias realizadas con anterioridad a la pandemia no suman como factor de riesgo , solo las recientes ) ya que este tipo de tratamiento debilita el sistema inmune, haciéndote más susceptible a cualquier enfermedad. Consulta con tu cirujano de cáncer de cabeza y cuello, cuál es la susceptibilidad de tu condición actual.

No obstante, independientemente del caso, no se puede tomar a la ligera la situación ya que todavía hay muchas cosas que no sabemos del virus, por eso lo mejor es extremar las medidas de precaución.

¿Cómo continuar con el tratamiento durante la pandemia?

Dependiendo del país en el que te encuentres, las condiciones para llevar a cabo tu plan de tratamiento pueden variar. Sin embargo, organismos de la comunidad médica internacional como la Fundación británica de tiroides, han agrupado algunas sugerencias para diferentes escenarios clínicos de pacientes con cáncer de tiroides. Estas son las sugerencias:

  • Pacientes que hayan completado el tratamiento para el cáncer de tiroides: Los pacientes que han recibido tratamiento previo para el cáncer de tiroides, como cirugía, con o sin yodoterapia, no se consideran con mayor riesgo de infección por COVID-19.
  • Pacientes con cirugía programada: Los pacientes con síntomas significativos y/o enfermedad rápidamente progresiva deben poder acceder a la cirugía. Para los pacientes con cánceres clasificados como de «bajo riesgo» donde la progresión se considera lenta, la cirugía puede retrasarse hasta un momento en que se considere más seguro proceder. La cirugía también puede diferirse para los pacientes considerados susceptibles a la infección grave por COVID-19 o que pueden necesitar un control intensivo después de la cirugía.
  • Terapia con yodo radiactivo: Desde que empezó la pandemia, la mayoría de centros médicos suspendió los tratamientos con I-131 debido a la sobrecarga de pacientes que trajo el COVID-19 y las preocupaciones del potencial contagio. En la mayoría de los casos, la terapia con yodo radiactivo no es urgente y puede retrasarse de manera segura. Sin embargo, conforme avanza el desconfinamiento en muchos países, es posible reiniciar el tratamiento, consulta con tu cirujano de cáncer de tiroides sobre esta posibilidad.
  • Terapia supresora de TSH: Los pacientes que reciben dosis supresoras de tiroxina (es decir, tienen un objetivo de TSH <0.1mU / l) deben continuar con su dosis actual. Estar en dosis supresoras de levotiroxina no aumenta el riesgo de infección por COVID-19.
  • Inhibidores de tirosin kinasas y quimioterapia: Los pacientes que reciben inhibidores o quimioterapia pueden tener  un mayor riesgo de desarrollar una enfermedad grave por coronavirus debido a que su sistema inmunológico se encuentra debilitado debido a la disminución del numero de glóbulos blancos. En estos casos, la continuación o modificación del plan de tratamiento dependerá de las recomendaciones de tu cirujano de cabeza y cuello u oncólogo clínico.
  • Radioterapia previa: Los pacientes que previamente recibieron radioterapia de haz externo en el cuello pueden tener un mayor riesgo de enfermedad grave con coronavirus y también deben considerar el autoaislamiento.

Ten un plan en caso de que te enfermes

Establece quién podría cuidarte en caso de enfermar y mantén el contacto con familiares, amigos, vecinos y profesionales de la salud durante este tiempo por correo electrónico o por teléfono, especialmente si vives solo.

Si llegas a estar expuesto conscientemente al virus o comienzas a experimentar síntomas como dolor de garganta, tos seca, fiebre o falta de aire, busca ayuda médica lo antes posible e intenta comunicarte con tu equipo de atención por teléfono antes de acudir personalmente a cualquier centro médico.

Si he tenido COVID-19, ¿podré continuar el tratamiento contra el cáncer?

Si has dado positivo por COVID-19, debes conversar con tu oncólogo o cirujano de cáncer de cabeza y cuello sobre el impacto de esto en tu tratamiento contra el cáncer. En muchos centros, se recomienda una prueba COVID-19 negativa antes de que la quimioterapia u otro tratamiento contra el cáncer comience nuevamente.

Sin embargo, algunos pacientes con COVID-19 continúan dando positivo incluso después de recuperarse de sus síntomas. En esta situación, tu equipo de atención médica considerará los riesgos y beneficios de reiniciar el tratamiento contra el cáncer de tiroides a pesar de la prueba positiva.

Cuando se reanude tu tratamiento contra el cáncer, es importante que utilices una mascarilla al asistir a la clínica o centro de tratamiento y que mantengas una buena higiene de las manos mediante el uso de desinfectante o lavado de manos antes y después de las visitas.

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Recomendaciones de para pacientes con cáncer de tiroides

Mientras el COVID-19 continúe expandiéndose en todo el mundo y especialmente, hasta que se cuente con una vacuna probada contra este virus, es crucial cumplir con las recomendaciones de expertos y de tu cirujano de cáncer de cabeza y cuello, para reducir el riesgo de infección. Las siguientes acciones ayudarán a prevenir la propagación del virus y proteger mejor a las personas, incluidos los pacientes con cáncer de la tiroides:

  • Toma los medicamentos exactamente como te los recetaron y asegúrate de tener los suministros adecuados de medicamentos en caso de emergencia.
  • Si experimentas fiebre, tos, dificultad para respirar u otros síntomas, llama a la línea de atención para casos sospechosos de COVID-19 de tu localidad y comunícate con tu médico para recibir asesoría.
  • Si experimentas algún cambio en tus síntomas de tiroides, comunícate con tu endocrinólogo o cirujano de cabeza y cuello.
  • Quédate en casa tanto como sea posible y evita el contacto cercano con otras personas.
  • Cúbrete la boca y la nariz con una cubierta facial de tela cuando estés cerca de otros.
  • Lávate las manos con agua y jabón regularmente durante al menos 20 segundos, especialmente antes de comer o beber, después de ir al baño y después de sonarte la nariz, toser o estornudar.
  • Si no hay agua y jabón disponibles, usa un desinfectante a base de alcohol que contenga al menos 60% de alcohol.
  • Cúbrete la nariz y la boca al toser o estornudar con un pañuelo desechable o un codo flexionado, luego tira el pañuelo a la basura.
  • Evita tocarte los ojos, la boca o la nariz con las manos sin lavar.
  • Limpia y desinfecta las superficies que con frecuencia tocas durante el día.

Actualmente no existe una vacuna para prevenir el COVID-19 y aunque se están realizando varios estudios clínicos para desarrollar una vacuna efectiva y segura lo más pronto posible, lo más probable es que tome varios meses en lograrse.

Por el momento, la forma más importante de protegerse es evitar la exposición al virus. Quédate en casa tanto como sea posible y evita los viajes, las aglomeraciones y el contacto directo con otras personas.

Como paciente con cáncer de tiroides, confía siempre en las recomendaciones de tu cirujano de cáncer de cabeza y cuello o de tu oncólogo, ellos mejor que nadie conocen tu historia clínica y podrán darte las recomendaciones más acertadas para tu caso. Si te gusto este artículo, déjanos saber ¿qué precauciones estás tomando para reducir el riesgo de contagio de COVID-19?

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