¿Cómo desintoxicarse después de la yodoterapia?

¿Cómo desintoxicarse después de la yodoterapia?

El cáncer es una enfermedad que afecta a un gran número de personas alrededor del mundo, siendo una de las principales causas de muerte. Afortunadamente, gracias a los avances científicos y la cultura de prevención, cada vez se diagnostica en estadios más tempranos y es posible tratarlo a tiempo.

Los tratamientos que se utilizan para tratar el cáncer dependen del tipo y de la etapa en la que se encuentre. Sin embargo, los planes de acción suelen incluir quimioterapia, radioterapia, cirugía y yodoterapia especialmente, en el caso del cáncer de tiroides.

 ¿Qué es la yodoterapia?

La yodoterapia es un tipo de tratamiento especialmente utilizado por el cirujano de cabeza y cuello para tratar el cáncer de tiroides. También conocida como terapia con Yodo I-131, se suele aplicar luego de la tiroidectomía para eliminar cualquier rastro del tumor y los restos de células cancerosas que persistan en el cuerpo.

Es un tipo de radioterapia muy efectiva, porque aprovecha las propiedades del yodo radioactivo, el cual es tomado fácilmente por las células. La glándula tiroides absorbe casi todo el yodo del cuerpo y al ingresar al sistema el I-131, éste se concentra en las células de la tiroides.

La aplicación del tratamiento también resulta muy sencilla y poco invasiva, ya que consiste en suministrar una dosis concentrada del isótopo de yodo por vía oral, a través de cápsulas o líquido. Posteriormente, el paciente deberá seguir una serie de recomendaciones para reducir los riesgos que conlleva la radiación, pero los beneficios de la yodoterapia superan con creces los potenciales efectos secundarios.

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¿Cómo desintoxicarse después de una yodoterapia?

Los pacientes con cáncer de tiroides que son tratados con yodo I-131, deben seguir cuidadosamente las recomendaciones de su cirujano de cabeza y cuello, para maximizar la efectividad del tratamiento y lograr una recuperación rápida.

Normalmente, la radiación permanece en el cuerpo durante algunas semanas después del tratamiento, pero el exceso es desechado por el cuerpo los dos días siguientes a su administración a través de orina, heces, secreciones y fluidos corporales. Sin embargo, ante la pregunta de muchos pacientes: ¿qué hacer después de una yodoterapia? hay algunas cosas que puedes poner en práctica, para ayudar a tu cuerpo a deshacerse de las toxinas más rápidamente.

  • Baños de desintoxicación: Entre los remedios tradicionales siempre se ha contado con los baños con sales medicinales e infusiones. Las propiedades del agua caliente y el vapor para abrir los poros, ayudan a eliminar toxinas de manera natural a través de la transpiración. Asimismo, este proceso favorece la absorción de nutrientes como magnesio y azufre contenidos en algunas sales de baño, los cuales contribuyen a generar enzimas purificantes.

Una buena opción para realizar baños desintoxicantes tras la yodoterapia, es agregar bicarbonato de sodio al agua, ya que este elemento neutraliza los efectos de la radiación. Combinado con sésamo y vinagre, esta infusión se convierte en una gran aliada para desintoxicar el cuerpo y relajar las articulaciones.

  • Beber agua: El agua es la forma más natural de eliminar las toxinas del cuerpo. Una buena hidratación es fundamental para el correcto funcionamiento de las células y los sistemas del cuerpo humano. Por eso, se recomienda beber suficiente agua (pura, no en jugos o infusiones), lo ideal es consumir entre 6 y 8 vasos diariamente.
  • Jugos verdes: Últimamente se ha puesto de moda beber jugos verdes para eliminar toxinas o adelgazar. Y lo cierto es que las propiedades de estas bebidas son increíbles para mejorar la salud, fortalecer el sistema inmunológico y desintoxicar.

Los jugos hechos de frutas y vegetales frescos, son limpiadores, energizantes y contienen un alto valor nutritivo que resulta muy útil cuando se quiere purificar el cuerpo tras la yodoterapia. Lo ideal es combinar varias porciones de vegetales de hoja verde como espinacas, col rizada, pepino y perejil, con algunas frutas como la piña o naranja. En internet se pueden encontrar muchas recetas y puedes modificarlas según tu gusto personal.

  • Ejercicio: La actividad física regular es muy importante para mantenerse saludables. Las rutinas cardiovasculares hacen que el corazón bombee, lo cual además de fortalecer el músculo cardiaco, hace que la sangre circule y elimina las toxinas del cuerpo. Además, también estimula la transpiración, lo que disminuye las toxinas y provoca sed, por lo que beberás más agua.
  • Consumir fibra: Los alimentos altos en fibra limpian el tracto digestivo y aceleran la evacuación fisiológica, lo que significa que los productos de desecho permanecen en tu cuerpo durante un período de tiempo más corto.

Para estimular el sistema digestivo, basta con llevar una alimentación balanceada, consumir más frutas y granos integrales, que aporten la fibra necesaria para el correcto tránsito intestinal.

  • Ducha de terapia de contraste: Este tipo de terapia, llamada así porque utiliza el contraste de temperatura del agua durante la ducha para estimular la circulación, es una buena opción cuando se quiere liberar toxinas.

Intercalar duchas de 1-2 minutos de agua caliente, con un chorro de agua fría durante 10 – 20 segundos y repetir el ciclo al menos 3 veces, aumenta la circulación sanguínea y favorece la liberación de toxinas a través de los fluidos corporales. Aunque practicar esta terapia no representa riesgos para el paciente, es importante esperar a terminar el tratamiento con yodoterapia para que el cuerpo esté más fuerte.

Todas estas estrategias son fáciles de aplicar y ayudan a estimular al cuerpo para que elimine de forma natural, las toxinas que puedan haberse acumulado tras el tratamiento para eliminar el cáncer de tiroides.

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5 sustancias para desintoxicar el cuerpo de forma natural

Existen muchos métodos naturales para eliminar las toxinas que se acumulan en el cuerpo, especialmente después de tratamientos con un alto nivel radioactivo, como el caso de la yodoterapia. A continuación, te presentamos cinco sustancias que puedes utilizar para limpiar tu sistema:

1 – Curcumina:

Esta sustancia se ha vuelto muy popular en los tratamientos después del cáncer, gracias a las recientes investigaciones que han logrado comprobar la eficacia de la curcumina, para reducir el riesgo de reaparición de tumores. Según un estudio chileno publicado en 2016, tiene un gran efecto sobre el cáncer de mama.

Entre sus propiedades, está la disminución de la inflamación y la mejora del sistema inmunológico del cuerpo. También tiene un efecto protector contra la radiación y es un excelente antioxidante de uso intensivo.

2- Genisteína:

Se trata de un bioflavonoide presente en la soja, que ha demostrado disminuir gran parte de los efectos secundarios de la radiación. La genisteína funciona porque instiga la apoptosis (muerte) de las células cancerosas, al desactivar su mecanismo de regeneración.

Este componente se puede encontrar de manera natural en leguminosas como la soja y los garbanzos y según algunos estudios, disminuye las probabilidades de desarrollar cáncer de mama, de ovarios, prostáticos y linfomas. Ayuda a prevenir infecciones, inhibe las células adiposas, reduce los riesgos de sufrir enfermedades cardiovasculares, previene afecciones como el hígado graso y la esteatosis hepática, y gracias a su efecto vasodilatador ayuda a controlar la presión arterial.

3- Astragalus:

Una hierba de origen chino que se suele utilizar para reforzar el sistema inmunológico, resulta ser una excelente opción para desintoxicar el cuerpo tras la yodoterapia. Se ha demostrado que la astragalus, ayuda a disminuir los daños que causa la radiación en los órganos, por lo que se utiliza en pacientes que han sido expuestos a algún tipo de elemento radioactivo.

Una investigación realizada en China en 2011, destacó que esta hierba fortalece las defensas y ayudar a que el cuerpo se deshaga de la radiación, pero también encontró que su consumo contribuye a restaurar el ADN a estándares normales.

4- Ginkgo Biloba:

El extracto de las hojas del árbol de Ginkgo biloba, se ha considerado tradicionalmente como una sustancia con altos niveles terapéuticos. Entre sus características, se han encontrado factores que reducen los marcadores sanguíneos provocados por la exposición a la radiación ionizante.

Gracias a sus propiedades de eliminación de radicales libres y antioxidantes, atenúa la lesión del órgano oxidativo inducida por la irradiación, por lo que consigue tener un beneficio potencial para mejorar el éxito de la radioterapia.

5- Miso:

La pasta de soja fermentada, conocida como miso, ayuda a sanar después de la exposición a la radiación. Algunos investigadores asociaron su consumo, luego de la tragedia de Hiroshima, donde miles de personas fueron expuestas a altos niveles de radiación.

Según los investigadores, quienes ingerían regularmente sopa de miso, redujeron sus probabilidades de desarrollar tumores cancerosos. Además, se ha encontrado que este alimento está especialmente relacionado con un menor riesgo de cáncer de mama, pulmón, e hígado.

Luego de la yodoterapia, muchos pacientes tienen dudas sobre cómo desintoxicar su cuerpo de la radiación a la que fueron expuestos. No obstante, cualquier plan de acción, debe ser personal y estar avalado por su cirujano de cabeza y cuello. Aunque en muchos casos las alternativas naturales pueden ser de gran ayuda para la recuperación, es importante valorar los pros y contras de cada protocolo que se inicia. Si te pareció interesante este artículo, cuéntanos ¿conoces algún otro método para desintoxicar el cuerpo tras la yodoterapia?

¿Cuándo hacer una biopsia de tiroides?

Biopsia de Tiroides

El cáncer de tiroides es un tipo de tumor que tiene una incidencia alta en mujeres hoy en día, y detectarlo a tiempo puede influir en gran medida en las probabilidades de curación. Cuando se sospecha clínicamente o por ecografía la presencia del mismo, su cirujano de cabeza y cuello puede sugerir la realización de una biopsia de tiroides para confirmar o descartar  el diagnóstico.

Es posible detectar el cáncer de tiroides durante la consulta con su médico, ya que los síntomas remitidos por el paciente y la exploración física pueden dar indicios de anormalidades en la tiroides. Sin embargo, la realización de una biopsia de tiroides es la forma de determinar correctamente si está presente el cáncer y permite crear un plan de tratamiento adecuado.

La biopsia de tiroides con aguja fina es un procedimiento poco invasivo, que a diferencia de la biopsia quirúrgica no deja cicatriz y resulta ser muy efectiva en el diagnóstico. Aunque el procedimiento no requiere una preparación particular, conocer cómo se realiza y lo que se puede esperar, le ayudará a disminuir el temor y ansiedad, antes de realizar este estudio.

¿Qué es una biopsia de tiroides BACAF o ACAF ?

La biopsia por aspiración con aguja fina de tiroides (BACAF o ACAF), es una prueba que se realiza para analizar los tejidos de los nódulos tiroideos y tomar una pequeña muestra de las células a través de la aspiración con la aguja. Resulta ser uno de los procedimientos más utilizados para diagnosticar el cáncer de tiroides.

La biopsia de glándula tiroides se utiliza cuando, luego de realizar estudios de diagnóstico por imágenes, no es posible determinar si un tumor es benigno o maligno. En estos casos, la BACAF puede ser sugerida por el cirujano de cabeza y cuello, como la mejor forma de lograr el diagnóstico acertado y oportuno.

El estudio se realiza mediante la introducción de una aguja muy fina que es guiada usando ultrasonido en la glándula tiroides. Una vez allí, se extrae una pequeña muestra de células que son posteriormente analizadas por un citopatólogo, quien determina si son células cancerosas.

La aguja que se utiliza en este procedimiento es angosta y de un calibre menor a las que se utilizan en los exámenes rutinarios de laboratorio o en la aplicación de vacunas. Asimismo, la extracción de la muestra, puede llevarse a cabo simplemente con la aguja, o colocando ésta en una jeringa o soporte para facilitar la aspiración de la muestra.

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¿Qué hacer antes de la biopsia?

Este procedimiento es sumamente sencillo y rápido, por lo que no se requiere una preparación previa demasiado rigurosa. Sin embargo, recuerde comentarle al cirujano de cabeza y cuello que lo está atendiendo, si tiene alergias a algunos medicamentos, problemas de coagulación en la sangre o – en el caso de las mujeres – si está embarazada o sospecha que podría estarlo.

También es importante suministrar una lista de los medicamentos y remedios tradicionales que esté tomando. Por lo general, su médico le pedirá que suspenda el consumo de medicamentos anticoagulantes varios días antes del procedimiento, para evitar el riesgo de hemorragias. Algunos de los medicamentos son:

  • Ácido acetilsalicílico (aspirin)
  • Clopidogrel (Plavix)
  • Ibuprofeno (Advil, Motrin)
  • Naproxeno (Aleve, Naprosyn)
  • Warfarina (Coumadin)
  • Rivaroxaban ( Xarelto)

¿Cómo se realiza la biopsia de tiroides?

La biopsia por aspiración con aguja fina es un procedimiento ambulatorio que se realiza en el consultorio del cirujano de cáncer de cuello o por el medico radiologo. Allí, su médico puede colocarle anestesia local para adormecer el área, aunque debido al pequeño diámetro de la aguja que se utiliza, a veces resulta innecesario.

El paciente debe acostarse boca arriba, con una almohada debajo de los hombros y el cuello extendido para dar una mejor visibilidad al área. Seguidamente, se debe limpiar y desinfectar la zona y se introduce la aguja dentro de la glándula tiroides, desde donde se extrae una muestra de células y líquido.

En algunos casos, si se hace difícil palpar correctamente la glándula, el médico podría utilizar un ultrasonido o escáner para guiarse al introducir la aguja. Es muy importante que, durante la realización del procedimiento, el paciente permanezca muy quieto y no trague saliva o emita sonidos, ya que cualquier movimiento en la tráquea puede dañar la muestra.

Al terminar, el medico retirará la aguja y aplicará presión en el área para detener cualquier sangrado que se haya producido. Posteriormente, el cuello se cubre con un pequeña curación y se le pedirá no ingerir alimentos en las horas posteriores; también podrán ser recetados analgésicos en caso de que el dolor lo requiera, pero la recuperación resulta sumamente rápida.

 

¿Qué resultados puede arrojar la biopsia de tiroides?

Cuando se realiza la biopsia por aspiración con aguja fina, se pueden obtener algunos de los siguientes resultados:

No diagnóstico: Significa que, durante la toma de la muestra, no se recogieron suficientes células para que el citopatólogo pueda emitir un diagnóstico confiable. En estos casos se hace necesario repetir el procedimiento, pero si se repite el resultado, el médico podría sugerir la realización de una biopsia quirúrgica.

Benigno: Cuando se obtiene este resultado, significa que no se han encontrado signos de células anormales en la muestra. El rango de precisión de la biopsia de tiroides puede ser hasta del 95% , por lo que, al arrojar este resultado, no es necesario proceder con una cirugía para retirar el nódulo, a menos que cause problemas al paciente tales como signos obstructivos sobre la traquea o el esófago.

Maligno: Este resultado implica que dentro de la muestra fueron halladas células cancerosas y se trata por tanto de un nódulo maligno. Por lo general, suele tratarse de cáncer papilar de tiroides o cáncer medular de tiroides. No obstante, en algunos casos poco comunes, se puede presentar un resultado de «sospecha de cáncer», lo que significa que hay aproximadamente una probabilidad de 80% a 90% de cáncer.

Neoplasias o Tumores Foliculares: Algunos tipos de tumores como neoplasia folicular, o neoplasia de células de Hurthle pueden requerir tratamiento quirúrgico por el riesgo de malignidad que representar y que puede ir hasta el 30 % de los casos

Celulas atípicas o de significado indeterminados: Este tipo de lesión significa que las células son anormales, pero para determinar correctamente el diagnostico requiere una nueva biopsia,  y si finalmente este  resultado no es satisfactorio podría requerir el paciente manejo quirúrgico de su lesión tumoral

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¿Cuáles son los beneficios y riesgos?

Como todo procedimiento médico, la realización de una biopsia de tiroides para diagnosticar el cáncer en esta glándula trae consigo algunos riesgos y beneficios.

Entre los beneficios, encontramos que la BACAF tiene un elevado porcentaje de exactitud en sus resultados, alcanzando cerca del 95%, cuando se realiza correctamente. Por lo tanto, se considera un método fiable para determinar si un nódulo es benigno o maligno.

Otro factor que hace muy atractiva la realización de una biopsia con aguja fina, es que resulta menos invasiva que las biopsias quirúrgicas. En los procedimientos quirúrgicos, tanto abiertos como cerrados, se realizan incisiones en la piel que pueden dejar cicatriz y, además, se requiere de anestesia local o hasta general.

Gracias a que la BACAF utiliza una aguja muy delgada, es en muchos casos indolora y se trata de un procedimiento ambulatorio, donde el periodo de recuperación es significativamente más breve que en los otros tipos y se pueden retomar las actividades diarias casi de inmediato, salvo con algunas molestias leves que pueden durar uno o dos días.

Sin embargo, como no todo es positivo, entre los riesgos de realizar este tipo de biopsia se encuentra el sangrado en el lugar de la penetración de la aguja. Para evitar o disminuir el sangrado, su médico le pedirá que días antes del procedimiento suspensa cualquier medicamento que tenga efectos anticoagulantes.

También se pueden producir infecciones en el lugar donde se realizó la biopsia y daños a las estructuras adyacentes a la tiroides. No obstante, estas complicaciones son poco comunes y la utilización de ultrasonido e imágenes de apoyo para guiar la aguja, disminuyen significativamente los riesgos.

En este tipo de procedimientos diagnósticos, así como en el transcurso de todo el tratamiento, es importante acudir a especialistas calificados que tengan la experiencia necesaria en este tipo de cánceres. Esto le permitirá sentirse seguro y confiado de estar en manos de una persona que sabe lo que hace, y que realizará una evaluación integral.

Agendar una cita con su cirujano de cabeza y cuello, especializado en cáncer de tiroides, es la mejor elección para la realización de la biopsia de tiroides. Ya que además de tomar la muestra, podrá realizar un examen general de la zona, identificar signos de cualquier anormalidad y sugerir otro tipo de pruebas que considere pertinentes para el diagnóstico en su caso particular.

Como hemos visto, no hay por qué temer una biopsia de tiroides con aguja fina, este procedimiento mínimamente invasivo y ambulatorio es la mejor herramienta para conseguir un diagnóstico acertado de cáncer de tiroides. Sin embargo, ante cualquier duda o inquietud, siempre la mejor opción será consultarlo con su médico  de cabeza y cuello. Si te has realizado una biopsia de tiroides o conoces a alguien que lo haya hecho, déjanos saber en los comentarios, ¿cómo fue tu experiencia? y ¿cómo valorarías los beneficios contra los riesgos del procedimiento?